Ella se aferra a mi brazo firme con su mano pequeña.
Ella se ríe y a mí se me ilumina el alma.
Ella me mira con sus ojos grises y mi alma descansa.
Ella camina despacio, pero ve lejos.
Ella todo lo sabe y una palabra suya es una súplica.
Ella es risa y es llanto, es dolor y es fuerza.
Ella es camino y es belleza, ella es mi madre y es mi hija.
Ella es mi origen y también mi certeza.
Categorías